Personajes: SeHun y LuHan (EXO)
Género: yaoi, fluff, romántico.
Clasificación: TP
~.~.~
¿Sabes,
Luhan? Tenías razón.
Las
personas, según nuestra personalidad, nos relacionamos con una
estación u otra.
Y,
mientras tú eras primavera, yo era invierno.
❄
Sehun
conocía lo que era estar solo de verdad.
Sus
padres le habían abandonado al nacer y se había criado en un
orfanato en el que el cariño era lo que más faltaba. Criarse entre
tanta hostilidad hizo que fuera un chico callado, cerrado y muy frío.
Una
sonrisa era algo imposible de ver entre los labios de Sehun.
Lo
único que le ilusionaba era bailar. Bailaba a todas horas, todo lo
que podía. No tenía dinero y, por lo tanto, no tenía dinero para
ir a clases de baile para instruirse, pero a él le bastaba con
bailar hasta cansarse.
Pronto,
bailar se convirtió en el único motivo que tenía para seguir
adelante.
Aunque
luego conoció a Luhan.
Un
día caminaba por la calle volviendo de clase, como de costumbre,
pero ocurrió algo que le cambiaría la vida.
Un
ojeador de SM, que buscaba chicos guapos por la calle, vio a Oh
Sehun.
—Eh,
chico -Sehun se giró extrañado, sin pensar que no le estaban
llamando a él-. Tú, sí, tú. ¿Te gustaría ser famoso? Vamos, yo
puedo conseguirlo. ¿Conoces SM? Yo soy de ahí, busco a chicos
guapos y talentosos como tú.
Sehun
se quedó parado, confuso, sin saber qué hacer. Tenía ganas de
huir, como siempre hacía. Huir de cualquiera. Así que salió
corriendo.
—¡Eh!
¡Eh!
El
ojeador empezó a correr hacia Sehun. El chico corría muy rápido y
casi se le escapa, pero el ojeador consiguió agarrarle de la mano
—¡Tú!
¿No quieres cumplir el sueño de cualquiera? ¡Ser famoso, actuar,
cantar, bailar!
Esa
última palabra hipnotizó a Sehun por completo.
Bailar.
—Sí
quiero -susurró Sehun.
—¿Cómo
dices?
—¡Que
quiero bailar!
El
ojeador se asombró. No esperaba que Sehun gritara.
—¿Quieres
bailar? ¡Pues ven! Te haremos una audición y podrás entra y bailar
todo lo que quieras.
Fue
entonces cuando Sehun dio el paso más importante de su vida. Y le
llevó junto a la persona más importante de su vida.
El
día que Sehun fue a SM fue muy contradictorio.
Primero,
las fans le asustaron. No esperaba encontrar tantas fans en la
puerta. Al llegar todas creían que era un idol y se emocionaron,
pero vieron que no era más que un trainee, susurraban decepcionadas
"pero
si no es más que un trainee".
Eso le desmotivó.
Al
entrar, le enseñaron las instalaciones. Al llegar a la sala de baile
en la que otros trainees entrenaban, le invadió un sentimiento de
plenitud. Por una vez no sentía ese vacío interior como todos los
días de su vida.
Y,
entonces, le vio.
Un
chico de piel pálida y pelo rubio se dejaba la piel en el
entrenamiento.
Bailaba
con suavidad, dejando caer los pasos sobre la pista.
Las
gotas de sudor que recorrían su frente caían al suelo y dejaban
huella, huella de su duro trabajo.
Y
tenía los ojos inundados de pasión.
Sentía
que ese chico entendía perfectamente lo que sentía él al bailar.
Era su vida.
Sehun
en ese momento no se dio cuenta, pero se había enamorado.
Xi
Luhan marcó un antes y un después en su vida.
Sehun,
en realidad, no supo en qué momento le conoció. Entró en SM y
conoció al resto de trainees, pero no hablaba con ninguno. No se
relacionaba ni se abría a nadie, no iba con él. Era un trainee
callado que se dejaba la piel ensayando.
—Hola.
Un
simple hola fue el motivo de su perdición.
El
momento en que miró a Luhan directamente a los ojos, supo que no
quería dejar de mirarlos nunca.
Esos
ojos llenos de brillo, de vida, de ternura. Un espejo del alma de
aquel chico de buen corazón. Todo eso que le faltaba a Sehun.
—¿Qué
tal? ¿Cansado?
Como
era costumbre, Luhan tenía la frente llena de gotas de sudor. Sobre
todo teniendo en cuenta que acababan de terminar de entrenar.
A
Sehun le costó lo que a él le pareció una eternidad en ser capaz
de responder a Luhan. No sabía si era porque estaba embobado, porque
estaba muy cansado o porque ya de normal le costaba mucho
relacionarse con la gente, pero le daba la sensación de que con
Luhan eso no le pasaba.
—Tú
sí que pareces cansado.
—La
verdad es que sí... Sudo mucho.
Luhan
sonrió. Y Sehun se deslumbró con su brillo.
Y
así fue como Luhan irrumpió en su vida.
Sehun
pasó noches enteras pensando. Nunca le habían gustado los chicos.
En realidad tampoco le habían gustado nunca las chicas. Simplemente
no le gustaban las personas.
Pero
con Luhan era distinto. Era tan distinto a él...
Puede
que fuera su aura lo que le gustaba. O sus ojos. O su sonrisa.
En
realidad se mentía, todo lo que tenía que ver con Luhan le
encantaba, pero de eso se daría cuenta más adelante.
No
supo cuándo, pero Luhan y él se volvieron íntimos amigos. Había
más trainees, pero ya estaban en grupos y no eran tan amigables o
buenas personas como Luhan para relacionarse con él. Y, aunque no le
cayeran mmuy bien, comenzó a relacionarse con ellos gracias a Luhan.
Aunque
Sehun no se diera cuenta, Luhan le estaba curando. Le curaba las
heridas de su pasado, le curaba de las personas, le curaba de la
soledad, le curaba el corazón.
Sehun
no estaba hecho para amar.
Pero
Luhan le enseñó a amar.
—¿Sabes
Sehun? Las personas somos como las estaciones del año según nuestra
personalidad.
Sehun
escuchaba atentamente las palabras de Luhan mientras estaban en el
dormitorio.
—Las
personas que son como el Verano son cálidas, alegres, sonrientes.
Pero también tienen mucho carácter y pueden tener bastante mal
humor. Las que son como el Otoño son tranquilas, calladas, algo
desconfiadas, pero cuando las conoces te abren el corazón, resultan
ser personas únicas. Las que son como la Primavera son tiernas,
delicadas, dulces, pero pueden esconder muchos secretos que no
quieren contar. Las personas que son como el Invierno son frías,
distantes, inexpresivas, pero todo eso es porque tienen un pasado
difícil. Al conocerles, son un amor de personas.
En
ese momento Sehun se dio cuenta de que él era como el invierno y
Luhan como la primavera.
Pero
no pensó en lo que quería decir que Luhan fuera la primavera.
"Pero
pueden esconder muchos secretos que no quieren contar."
Sehun
no sabía si Luhan le amaba tanto como él amaba a su hyung.
Se
preguntaba si pensaría en él tanto como pensaba el chico en su
hyung.
Tal
vez sí. O no.
Le
sacaba de quicio que Luhan se preocupara tanto por él pero no
supiera casi nada sobre su pasado, su familia, sus sentimientos... Le
escuchaba pero nunca hablaba de sí mismo.
No
sabía si quien estaba siendo egoísta era él o Luhan.
♣
¿Sabes,
Sehun?
Mientras
te veía ser más vital, apasionado, feliz, yo me consumía poco a
poco.
Era
cierto.
Al
estar con otra persona, se te pegan ciertas cosas de su personalidad.
Y
mientras tú eras poco a poco más primavera, yo era poco a poco más
invierno.
♣
Luhan
nunca hablaba de sí mismo. No le gustaba hablar de sí mismo.
Todo
ello se remontaba al pasado, a cuando de pequeño perdía a todos sus
amigos por hablar sin parar. Le llamaban pesado, ególatra, hablador
y él lloraba mucho.
Además,
sus padres no le apoyaban en nada. Ni siquiera en su sueño de ser
cantante -o futbolista, aún no se decidía-.
Si
no fuera por su hermano mayor, no hubiera sobrevivido a todos esos
insultos diarios ni la constante ignoracia de sus padres.
—¿Sabes?
Esos niños no son nada. A mí me encanta escucharte hablar y charlar
contigo es genial. Lo que pasa que ellos te ven con malos ojos y eso
es imperdonable. Hay que mirar siempre a todo el mundo con buenos
ojos y no juzgarles, porque a veces quien menos lo parece resulta ser
una gran persona.
Luhan
se secó las lágrimas como pudo con sus manitas y miró a su
hermanito, fascinado. Entonces recordó a sus padres y volvió a
entristecer.
—¿Y
papá y mamá? Se toman a broma e ignoran mi sueño de ser cantante.
—No
te pongas límites, pequeñín. Lucha por tus sueños y punto. ¡Al
cuerno mamá y papá!
El
pequeño Luhan no lo hubiera imaginado, pero unos años adelante un
ojeador de la SM le vería mientras iba de compras con sus amigos.
Y
entonces, gracias a las palabras de su hermano, Luhan iría a Corea
sin dudarlo para cumplir su ansiado sueño.
Al
llegar a Corea, nada sería fácil. Aunque Luhan ya lo sabía.
Tardó
bastante en poder comunicarse con otros trainees, ya que no hablaban
chino, pero en cuanto pudo hablar coreano intentó a toda costa hacer
amigos.
Entonces
recordó el motivo por el que había perdido tantos amigos en el
pasado y decidió cambiar.
Ya
no hablaría más de sí mismo.
Hizo
bastantes amigos, pero seguía sentiéndose vacío sin familia y sin
nadie.
Necesitaba
que alguien le llenara, le hiciera sentir especial y llenara ese
vacío cada vez más grande en su pecho. Alguien que le hiciera
plenamente feliz.
Y
ese era Oh Sehun.
Era
un día normal. Iba a clase, comía, entrenaba, dormía. Lo típico.
Pero
ese día le iba a cambiar la vida aunque él no lo supiera ni tan
siquiera lo supusiera.
Llegó
a SM y se dejó la piel bailando, como siempre. Le habían dicho que
tal vez dentro de poco debutarían. Tenía tantas ganas. Pero sentía
que era una falsa esperanza, una promesa que no cumplirían.
Frustrado,
decidió dedicarse aún más al baile. Dedicarse en cuerpo y alma
para que ese sueño, el de debutar, se cumpliera.
Y,
entonces, le vio.
En
el espejo, mirando había un trainee nuevo.
Un
chico normal pero que rebosaba inocencia.
Le
brillaban los ojos al ver esa sala y al resto de trainees bailando.
Un
niño tímido e ilusionado en el cuerpo de un adolescente.
Siguió
bailando pero supo que ese chico le cambiaría la vida.
Luhan
no se quitaba a aquel niño grande de la cabeza. Hasta que no le vio
en el entrenamiento, no creía que fuera real. Creía que había sido
un espejismo o una ilusión. Pero al verle, se prendó muchísimo
más.
Le
vio bailar. Le vio vivir por el baile. Le enamoró con su baile.
Y
el chico se sintió vivo. Sintió que aquel niño dejaba de serlo
para parecer un bailarín que vivía por y para el baile. Y, aunque
no era el mejor -era difícil ser mejor que Kai-, deslumbraba.
Brillaba él solo.
Tal
vez Luhan le idealizaba en su cabeza, pero le parecía tan
especial...
Y
no pudo hacer más que ir a hablarle justo cuando acabó el
entrenamiento. No aguantaba más. Se moría de ganas por poder hablar
con aquel niño tan adulto.
Al
conocerle, supo que era un chico con un pasado difícil. Sin padres.
Sin vida. Sin amigos. Pero con un sueño y una pasión. Y eso era lo
que fascinaba a Luhan, era tan parecido a él que daba miedo.
Era
desconfiado. Le costó mucho que le abriera su corazón, pero al
final terminó abriéndoselo y Luhan, entonces, se enamoró
perdidamente.
Ya
no había vuelta atrás.
A
pesar de eso, él no quería que le conociese. No quería que supiese
que era un chico egoísta y falso, que no era él mismo por no
perderle. Fingía para no perder su amistad.
O
su amor.
No
quería perderle por ninguna razón del mundo.
Pero
pronto sentía que mentía a aquel niño tan feliz con su piruleta.
Decirle la verdad sería como arrebatarle aquella piruleta. Le haría
daño.
No
quería hacer daño a su pequeño.
Aunque
pronto Sehun se dio cuenta.
—¿Sabes?
No te conozco.
—¿Q-qué?
-Luhan estaba desconcertado, perdido.
—No
te conozco. Y me duele. Quiero conocerte y que dejes de protegerme.
—No
quieres conocerme. No soy esa primavera que crees que soy. No soy
ninguna estación. Soy solo... Alguien incapaz de conservar ninguna
amistad.
—¿Y
cómo es que has conseguido que quiera vivir cuando mi mundo era un
agujero negro?
—Siendo
amable. Solo dices eso porque nadie había sido amable contigo antes.
Sehun
se quedó pensativo. Tenía razón, pero no quería dársela.
—D-da
igual. Si quiero conocerte es por algo.
—Te
has equivocado todo este tiempo. Tú eres primavera, yo soy invierno.
Tú representas la vida, la alegría, la satisfacción. Mientras, yo
soy alguien que se oculta en las sombras y se hace pasar por alguien
que realmente no es para tener amigos. Así de egoísta y falso soy.
—Yo
no lo veo así. Yo creo que eres como un ciervo, que se esconde por
miedo. Por miedo a todo, no se arriega. Deja de vivir, de sentir, de
experimentar. Pero cuando bailas se ve tu personalidad real. Eres
apasionado, luchador y tienes ganas de vivir. Y, aunque intentes
contentar a todo el mundo, tú no eres feliz.
Esta
vez era Sehun quien tenía razón aplastante. Luhan se quedó sin
palabras.
—Me
enamoré al verte bailar. Me enamoré del Luhan verdadero. La parte
tierna y dulce, el angelito Luhan que protege a todo el mundo y hace
lo que todo el mundo quiere también me gusta, pero yo me he
enamorado del Luhan que me habló porque le apetecía y cambió mi
vida.
Sehun
estaba a pocos centímetros de Luhan. Esperaba a que éste
reaccionara, pero viendo su vista perdida no tuvo más opción. que
cortar las distancias y juntar sus labios.
Entonces
la mirada de Luhan se llenó de brillo.
Y
se dieron cuenta de que Sehun era invierno y Luhan era primavera,
pero juntos brillaban más que el verano.
Juntos
eran verano.
Nera
Hola soy Sweetdreams, puntuo este fic con un 2.No soy fan de los yaoi, pero no ha estado mal.Gracias.
ResponderEliminarPuntúo este fic con un 5.
ResponderEliminarEs interesante que sea la historia de como se formó el HunHan (desde mi punto de vista parece que cuenta eso). Y también es un buen factor que la historia cuente la versión de los dos protagonistas. Una buena estructura con buenas expresiones, y una buena metáfora la de las estaciones. Buen trabajo.
[Hana] A pesar de que la historia está super bien escrita mi puntuacion es de un 2, lo siento pero el recurso de usar yaoi en los concursos porque es lo que más puntua es algo que no me gusta.
ResponderEliminarPuntuación: 2
ResponderEliminarDe nuevo el tema del yaoi. No es que lo odie, pero simplemente leer yaoi en la mayoría de los oneshots cansa bastante y te acaba pareciendo pesado.
puntuo este fic con un 2. no soy muy fan del yaoi
ResponderEliminarPuntuo el fic con un 1
ResponderEliminarMe aburrio un poco la historia, aunque el tono romantico estuvo bien.. lo de utilizar el yaoi no me gusto, además no conozco EXO.
Puntúo el fic con un 5.
ResponderEliminarSi digo que me ha encantado creo que me quedo corta. Estoy enamorada de tu forma de escribir y de todo lo que transmites con ella. Ha sido genial el utilizar las estaciones para explicar como son Sehun y Luhan (lo del verano ha sido precioso ;;) El fic ha tenido la dosis justa de fluff y no ha sido pesado en lo absoluto. Una escritura y desarrollo perfectos.
Puntúo el fic con un 5.
ResponderEliminarMe ha encantado la forma de escribir y de expresarse, ha sido genial. Además, me ha parecido que cuenta la historia desde un punto en el que no es presente ni tampoco totalmente pasado, por lo que no me ha parecido un desarrollo demasiado apresurado. He leído el fic sin pararme a pensar "¿cuánto queda?", y todo ello junto dan la máxima puntuación.
[Stefy]
Puntuando con un 1.
ResponderEliminarEl tema yaoi me gusta pero creo que mas para ver anime que para leer one shots.
Suerte.
Nota: 5.
ResponderEliminarJustificación: La verda es que me he sorprendido un montón. Soy muy perfeccionista, siempre exijo mucho y hasta ahora los demás fics me habían dejado mucho que desear, pero este en cambio me ha fascinado.
El avance de la historia es lento, tal y como me gusta a mí. Nunca me han gustado los one-shots porque son todos al corre corre, las escritoras los escriben como si tvueran prisa y los acontecimientos son todos muy rápidos y poco realistas. Por eso me ha encantado este, porque eso no pasa. Se desarrolla la historia tal y como debe, todo poco a poco, y aunque tengan un flechazo no se enamoran al instante (me saca de quicio cuando pasa eso en los fics).
La profundidad de los personajes es impresionante. Sus personalidades, tan distintas pero a la vez tan iguales... Y que profundices en sus problemas, en su pasado, eso es lo que busco yo en un fic.
La metáfora de las estaciones ya me ha prendado. Cuando Luhan describía cómo son las personas de cada estación me he sentido muy identificada y he estado muy de acuerdo con él. Cada estación tiene sus cosas positivas y negativas.
Nada más que decir. Este fic merece más que un 5.
Mi puntuación es de un 5,ha captado mi atención desde el principio y esta bien narrada.
ResponderEliminarPuntuó este fic con un 3.
ResponderEliminarHa estado muy bien. La trama y la evolución de los personajes es muy interesante. No llega a ser sobresaliente porque el lenguaje utilizado no es muy fluido.
Nombre :Umi
ResponderEliminarLo puntúo con un 2, lo siento siempre me pasa lo mismo pero es que no soy muy fan de yaois de grupos que no conozco por lo que no me llegan a atrapar tanto como lo haría alguien que es fan.
Puntúo este fic con un 5.
ResponderEliminar¿Por qué? Por que has reflejado algo que me hechiza, la pasión. La pasión por algo como el baile. La pasión que le da la vida al alma.
No he podido evitar preguntarme... Que estación sería yo.
'Y mientras tú eras poco a poco más primavera, yo era poco a poco más invierno.' -> Me ha encantado.
Ellos luchan, se encuentran... Cambian, siguen luchando. Aprenden a ser algo más, a ser diferentes, y a serlo juntos.
Y eso me gusta, porque enamorarse no hace que conozcas a la otra persona al 100%, hace que necesites, conocerla.
Me alegra que los ojos de Luhan brillen otra vez.
Si pudiera puntuar tu fic con un 10. Lo haría.
Porque sencillamente, me gusta.
¡Mucha suerte!
Le doy un 5. A pesar de que el yaoi no me apasiona, me gusta como escribes y se me ha hecho muy ameno de leer. Describes muy bien las situaciones y los sentimientos de los personajes. Mucha suerte!
ResponderEliminar